Mi madre murió el 29 de julio de 2016. El verano pasé por el alto de San Colmado de vuelta de playa América. Paré para comprar rosquillas. Había fiesta. La orquesta interpretó "Francisco Alegre", una canción que cantaba mi madre.
La iglesia católica construía pequeñas ermitas en lugares de culto precristiano. Esa práctica se siguió practicando en América Latina.
Hoy me enterado que la fiesta de los muertos de los celtas fue convertida en una fiesta cristiana gracias al Papa San Gregorio III, en el siglo VIII. Los irlandeses cuando en el siglo XIX migraron masivamente a los EEUU por culpa de la peste de la patata se llevaron el samaín con ellos y allí tomó el nombre de Halloween.
La fiesta de los muertos mexicana se celebraba en agosto. Hoy en día se celebra coincidiendo con la celebración de la fiesta de Todos los Santos.
La iglesia Católica, heredera del sistema de organización del imperio romano, por eso se llama Iglesia Católica (que en griego significa "universal") Apostolica y Romana, continuó integrando los cultos locales al culto cristiano. Por eso existe el culto a la Guadalupe en Mexico, y en el Ecuador tenemos en el norte del país a la Virgen del Quinche y en el sur a la Virgen de la Nube.
En el orbe cristiano ha habido tres grandes guerras civiles. Estas guerras ocultaban conflictos étnicos subyacentes. Sin embargo, como se formulaban era como un choque entre dos facciones que tenían puntos de vista sobre temas poco relevantes. Las guerras han sido la lucha entre trinitarios/unitarios; iconoclastas/iconódulos y la de católicos/protestantes. Estas guerras se producían entre los que asociaban los símbolos al territorio (trinitarios, iconódulos, católicos) y los que propugnaban que los símbolos se debían asociar a algo superior: el emperador, los lazos de sangre (unitarios, iconoclastas y protestantes).
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