El amor es el viaje en busca del otro

 Quinteto para cuerdas en Do Mayor, Op. 163 D. 956 (Adagio). En el libro de memorias "Verano" de Coetzee, se narra como el autor pretendía hacer el amor con sus amantes utilizando el segundo movimiento como música de fondo del encuentro, con un resultado desastroso.

Verano es una autobiografía extraña. En el libro, Coetzee plantea que se ha muerto y un biógrafo inglés entrevista a cinco personas para hablar del autor sudafricano. El periodo que cubre es cuando Coetzee tenía 30 y tantos años, estaba solo en el mundo y vivía con su padre anciano.

Los treintaytantos es una edad en la que uno está en la plenitud de la vida mientras que la de tu padre enfrenta ese momento en el que deja el trabajo y por tanto algo que lo ha definido como persona lo abandona. Es un golpe muy fuerte. Las amas de casa no sufren ese descenso brusco que ocurre cuando dejas de trabajar y descubres que aquella vida del trabajo a la que habías dedicado tanto esfuerzo se ha ido y que lo único que te ha dejado es una pensión. Este es el tema principal de la película de Alexander Payne "About Schmidt".

En el libro "Verano" también podemos encontrar este bello párrafo en la página 100 de la edición de Mondadori: "Debíamos tener seis años. No recuerdo las palabras exactas, pero sé que te estaba abriendo mi corazón, te lo contaba todo acerca de mí, todos mis anhelos y esperanzas. Y mientras tanto pensaba: -¡De modo que esto es lo que significa estar enamorado!-. Porque, permíteme que te lo confiese, estaba enamorado de ti. Y desde aquel día, estar enamorado de una mujer ha significado para mí ser libre de decir todo lo que siento".

Con los seis años comienzas a tener un discurso propio, y descubres que hay cosas que no son como te las han contado y ahí nace la necesidad de comprender y compartir. Es en el reino de la palabra, en la comprensión del otro donde reside el amor. El amor no es la perfección, es el viaje en busca del otro. No es instinto, porque el instinto es innato y por tanto no nos pertenece.

Cuando detectas que tu padre se hace viejo, que comienza a repetir sus historias, que ya no se desarrolla como profesional, que se dedica a dejar pasar el tiempo... que poco a poco va perdiendo facultades... en ese momento te entra la angustia de perderlo. Lo mismo que en la vida de un niño hay un momento en el que descubres un pensamiento propio, en la vida de un adulto hay un momento en que descubres la capitulación vital. En ese momento comienza la vejez. En Dersú Urzalá la película de Kurosawa, un espíritu del bosque le dice al protagonista, Dersú, que ya no es tiempo de estar más en el bosque. La vejez ha llegado y con ello el viaje hacia abajo hasta que llegue el momento en que poco a poco vas perdiendo los pensamientos propios y solo te queda recordar aquellas anécdotas que crees son importantes, por alguna razón. Ya no viajas en busca del otro. Miras a los ojos a quienes quieres y les muestras tu afecto. ¡Hasta pronto!