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lunes, 18 de marzo de 2019

Aprender a luchar

Aprender a luchar. Lección 1: no seguir a líderes. Los gurús siempren hacen hincapié en que debes ser curado. Son como eucaliptos que no dejan crecer nada a su alrededor.
La montaña mágica de Thomas Mann.
En la novela "La montaña mágica" dos primos se recluyen en un sanatorio para tuberculosos. Descubren que una acción tan inofensiva, como es el visitar a aquellos pacientes que ya han sido desahuciados por los médicos porque no se van a curar, se convierte precisamente en una señal de mal agüero por los enfermos. Cuando te visitan los primos es que te vas a morir. En un mundo preantibiótico la tuberculosis es un mal de los que pocos se escapan. Durante su estancia, que en un principio iba a ser breve, se prolonga en el tiempo. El protagonista comienza a tener conversaciones con dos personajes, un jesuita y un liberal carbonario. Son dos figuras que tratan de convencer al protagonista de sus propios puntos de vista. Ambos son personas cultas y con una admirable capacidad de argumentación. Hans Castorp, el protagonista, joven y con menos formación que sus interlocutores tiene que ir tamizando los puntos de vista para poder formarse su propia visión de la vida. Algo en común del jesuita y del carbonario es que sus opiniones son concluyentes, seguras de su verdad. La postura de Hans se escora hacia la duda.
La industria de los expertos, un documental muy interesante, en donde vemos como desde los medios de comunicación se nos imponen constantemente voces desde la autoridad que nos dicen que hacer y que pensar.

¿Cuánto se puede equivocar una persona?

Durante nuestra formación seguimos los pasos de maestros que nos explican en qué no debemos equivocarnos. Llega un momento en el que nos damos cuenta que cada persona debe de aprender por si misma, y en función de su historia personal, a no equivocarse en lo que es fundamental para cada uno. No existen fórmulas generales. Nos equivocamos por no conocer las reglas del juego y por no conocernos a nosotros mismos. Notamos cuando nos equivocamos cuando no somos capaces de tener un mínimo éxito en el mundo en el que vivimos. Notamos que nos equivocamos cuando tenemos ese éxito y aun así no somos felices.

Me gustó la entrevista a Julio Anguita y sus opiniones sobre la educación hasta que lo oí defender la figura de un dictador como Fidel Castro. La entrevista entera la podéis escuchar aquí, no tiene desperdicio.
Lo que dice tiene mucha razón ¿Por qué alguien tan juicioso no puede reconocer en Castro la figura de un dictador? Todos los cubanos que he conocido han descrito a la isla como la puesta en escena de "La rebelión en la granja" y "1984" ambas novelas escritas por George Orwell.
Goya: Los sueños de la razón producen mostruos
Ha habido grandes pensadores que no han querido ver que, como decía Goya en su grabado "Los sueños de la razón" que éstos producen monstruos. Un caso paradigmático es el de Martín Heidegger, autor del influente "El ser y el tiempo" que apoyó al partido nazi hasta el fin de la guerra. Si este autor hubiese visto a los camisas pardas dar palizas en las cervecerías se habría percatado de que estaba apoyando a unos matones descerebrados, pero no, prefirió juzgarlos desde lo teórico. Para ser el lúcido filósofo que fue, su antisemitismo era visceral y primitivo. No podemos olvidar que las palabras y las adhesiones nos convierten en cómplices cuando hay una traducción a hechos deleznables como la guerra de exterminio y el holocausto.
Aprender a luchar. Lección 2: cuidado con las lealtades. La gratitud, especialmente a aquellas personas que nos han amado, como los padres, hacen que muchas veces escojamos caminos o profesiones que sirven para complacerlos. Si esa profesión se ajusta a la personalidad del hijo no hay ningún problema, pero ¿Qué ocurre cuándo se convierte en una carga pesada? En la literatura y en el cine hay innumerables ejemplos de esto, por ejemplo, Ciudadano Kane de Orson Welles. Igual que el protagonista, concentramos todas nuestras energías en realizar un plan que ha sido diseñado por otros, aunque esos otros sean personas tan queridas como lo son nuestros padres. Nuestro deseo íntimo queda sepultado por una ambición ajena y se revela al final de nuestros días en una palabra "Rosebud" que es la marca del trineo con el que jugábamos antes de ser introducidos en ese plan de vida impuesto.

Aprender a luchar. Lección 3: la trampa de los grandes ideales. A nuestro alrededor podemos comprobar multitud de casos de personas que han dedicado gran parte de su vida a los grandes ideales. Conozco casos de personas que sufrieron depresión con la caída de la URSS. Ateos que pertenecieron a la orden de los Jesuitas por más de 25 años. En el libro "La recomposición de la crisma" de Satur Sanguesa, pseudónimo de Suso Mendive, se narra cómo el autor dio 20 años de su vida a un proyecto de vida que le era ajeno y como despertó a los cuarenta años, solo y sin dinero, a una vida fuera de la institución.

Una de las características de aquellos que han estado enfangados con los grandes ideales es que a pesar de haber salido de sus instituciones y de renegar de ellas, en el fondo, no pueden dejar de reconocer lo mucho que esas instituciones han penetrado en ellos. Es una de las características de las personas que han sufrido cierto nivel de control mental: nunca dejas de ser parte de la secta de algún modo. Son como los exfumadores, exjugadores, exdrogadictos. Aunque lo hayan dejado siempre está el riesgo de la recaída. Cuando perteneces a un colectivo tu lucha es la del colectivo. Tus deseos y anhelos también.
Roger Schank es el típico gurú que tiene la solución para la educación: crear 500 cursos online para cubrir toda la enseñanza para todo el mundo. Cargarse la educación tradicional, según él, completamente ineficaz por un sistema universal orientado no al conocimiento y si a la empleabilidad. A pesar de que discrepe, la frase, el meme, creo que es pertinente
Aprender a luchar. Lección 4: no puedes aprender a tener hambre sin sentirla. Lo mismo ocurre con la lucha. Es deprimente ver en los niños de clase media esos ojos sin brillo, esos anhelos que son como la espuma controlada (Ni poca ni mucha para su colada). En las noches de Quito siempre se puede ver a niños vendiendo dulces y cigarrillos en la calle en las zonas de ocio. Un día vi a uno de estos niños cogiéndole los dulces y cigarrillos de la caja de otro niño, bastante más alto y corpulento que él. Le agarraba los dulces de la caja y se los tiraba a los patios de las casas colindantes. Mientras hacía esto daba saltos y le lanzaba puñetes a la cara. El grandullón no sabía que hacer porque el pequeño estaba decidido a sacarlo de su zona de trabajo. Me admiró la determinación y la falta de miedo del niño. Quizás le tenía miedo a la paliza por no vender lo suficiente. Luchas cuando sabes perfectamente cuales van a ser las consecuencias de no luchar.

Cuando en los países modernos se decidió promulgar leyes que condenaban el trabajo infantil y se impuso la educación obligatoria, esto, que en principio es bueno y deseable, tuvo colateralmente el efecto de que muchos alumnos asumieron que lo natural era estudiar el bachillerato, independientemente de los años que tomase, una carrera, un master... Hay alumnos que no quieren aprender. Y frente a eso hay poco que hacer. Se debería apartar a esos alumnos y permitirles trabajar. De nada sirve que les digas que tienen que estudiar si no perciben en carne propia qué significa trabajar sin formación.

Aprender a luchar. Lección 5: por favor, déjeme ser responsable y no me proteja. Desde el poder público se han instaurado políticas de protección que minimizan la responsabilidad de los individuos. Una de las características que hacían que los griegos estuviesen por delante de los persas en las guerras médicas, era el hecho de que los griegos no eran súbditos. Los griegos eran ciudadanos y por ello, responsables. Los súbditos acatan órdenes, no se puede esperar de ellos iniciativa. Cuando aceptamos que nos protejan nos restan capacidad de elección y de responsabilidad individual.
Durante la política del "Gran salto adelante" de Mao Tse Tung murieron alrededor de 30 millones de personas. Los sueños de la razón producen monstruos. El proyecto no funcionaba, pero nadie lo decía. Las autoridades regionales manipulaban las cifras para satisfacer al gobierno de Pekín y éste a su vez aceptaba de buen grado las proyecciones optimistas para evitar toda autocrítica al proyecto. La idea podía ser buena en el papel, pero cuando se le niega la responsabilidad a las personas ocurren estas cosas.

Poner a un alumno 9 exámenes de teoría y 3 exámenes de prácticas y 15 preguntas evaluables antes de la realización de la práctica, más la entrega de tres tareas obligatorias y la lectura de un libro en 4 meses de semestre es una barbaridad. Pero se hace ¿Por qué? para obligar a que los alumnos estudien, que vayan al día. En vez de tener un solo examen, que sería suficiente porque a la postre los buenos alumnos ya se saben quienes son desde el primer día, ahora tienen 30 tareas evaluables.

PRÓXIMAMENTE

Aprender a luchar. Lección 6: trabaja en organizaciones "Task force"

Aprender a luchar. Lección 7: Huye de las etiquetas y los arquetipos. Una de las ideas modernas más interesantes es la de incorporar la línea de tiempo al razonamiento. Esto ha propiciado la aparición de la evolución, el psicoanálisis, el análisis económico...

Aprender a luchar. Lección 8: saber reconocer cuando evitas hablar de un asunto obvio. Este bloqueo muchas veces funciona como un cáncer que se extiende y va afectando a otros temas. Poco a poco descubres que solo hablas de cosas cotidianas y sin importancia. Un síntoma es cuando descubres que la comunicación con tus personas más cercanas y queridas es pobre y circunstancial. En el control mental siempre se aparta al adepto de sus personas queridas. ES una forma de anulación de la personalidad. Las personas queridas son aquellas con las que hablas de cosas con las que no hablas con nadie, o con las que hablas de cosas de tu infancia que si no hablas con ellas no las vas a poder hablar con nadie más porque otras personas no comparten ese tiempo común. No se necesita controlar totalmente a la persona. Simplemente se evita hablar de un tema. Ese silencio irá contagiando a otros temas y poco a poco te irá apartando de tu vida anterior y le dará sentido a tu nueva vida.

Este tema ha sido tratado por el escritor de cuentos Andersen en "La Reina de las Nieves". En este cuento, al protagonista, Kay, le entra en el ojo un pedazo de espejo que el diablo construyó para que las personas que se viesen en el observasen todos sus vicios y defectos magnificados. A partir de ese momento Kay se volvió en un crítico, en un especialista en magnificar los defectos de los demás. Cuando la Reina de las Nieves lo encuentra le da dos besos, con el primero le quita el frío y con el segundo consigue que se olvide de su abuela y su amiga. Kay se marcha con ella a su palacio y juega con los perfectos trozos de hielo, con la excelsa matemática de lo que no tiene defectos.

No es necesario tener el control absoluto, simplemente conseguir que se hable de algo. Esa acción por si misma contagia y pudre a la mayoría de las cuestiones importantes.

Aprender a luchar. Lección 9: comprender a quienes nos educaron nos ayuda a comprendernos a nosotros mismos.

Aprender a luchar. Lección 10: construir un territorio a base de tener un espacio, una historia, familia y relaciones con la sociedad. En la novela Serotonina de Houellebecq o en Desgracia de Coetzee se puede observar los estragos que producen en los protagonistas carecer de un territorio.

Para saber más: 

https://javierpeteirocartelle.blogspot.com/2019/03/medicina-el-cinismo-proteccionista.html

https://evolucionyneurociencias.blogspot.com/2017/08/como-la-gente-normal-se-convierte-en.html

https://actuaciencia.blogspot.com/2018/04/desverguenza-descarada.html

https://actuaciencia.blogspot.com/2018/04/el-eucalipto-que-no-deja-crecer-otras.html

http://bacteriasactuaciencia.blogspot.com/2014/09/task-force.html

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