Gurús en la escuela

 

Portugal como Finlandia mejoraron en las pruebas PISA sus resultados a base de introducir unas variables en la educación que nada tiene que ver con el uso de tecnologías, ni con poner en práctica teorías educativas sin demostrar (las inteligencias múltiples, los estilos de aprendizaje y el cerebro reptiliano NO EXISTEN), ni con hacer al alumno protagonista de su aprendizaje. Esas variables se llaman esfuerzo y exigencia y no cuestan un euro, pero tienen como consecuencia que todos los alumnos mejoran, hasta los que que tienen más dificultades.

Lo contrario al esfuerzo y exigencia es darles a los alumnos un "sustitutivo del verdadero aprendizaje" en forma de título. Un título para el que hay que endeudarse y pagar. Un título que no sirve para nada, y que por ese motivo tiene que ir seguido de otro título, llámese master, y claro, como tampoco vale para nada entonces vamos a por otro título, el de doctorado. Para pagar estos títulos hay tres modalidades: te los pagan tus padres, tienes una beca, trabajas para pagártelos. Como es muy complicado trabajar y sacarte esos títulos y sus tesis correspondientes hay empresas fantásticas que por una suma te hacen la tesis. Hay una empresa en Alemania que por 50.000 euros te hace una tesis doctoral. Para pagarla tienes o bien que endeudarte o tener otro trabajo con el que pagarla. 

El sistema educativo de los EEUU se basa en el principio de cómo vender una pluma que se expone en la película "El lobo de Wall Street":

-Te voy a hacer una oferta ¿Tienes una pluma para escribirla?

-No

-Yo te vendo esta pluma

Tesis doctoral a la venta